Si hay algo que podemos afirmar con total certeza es que el mercado de trabajo y los procesos productivos se caracterizan por tener un dinamismo increíble, en el que constantemente se están dando cambios. Esos cambios surgen de diferentes factores como por ejemplo la innovación tecnológica que día a día trae nuevos productos e ideas que revolucionan la producción, lo que a su vez genera cambios en la organización del trabajo y en el mercado laboral.
También podemos citar como factores de cambio la crisis económica y muy recientemente la pandemia. Sin embargo, esos cambios que se dan no siempre van acompañados de cambios en la parte normativa, pues es común que las disposiciones legales vayan mucho más lento que lo que sucede en los procesos productivos y el mercado laboral.
Excepción a esta regla se ha dado durante la pandemia. Nunca se habían dado tantos cambios normativos y tan rápido como sucedió en la pandemia: cambios como el teletrabajo, la reducción y suspensión de jornada, cambios que también estuvieron fundamentados en una producción normativa tan enorme y variada como nunca antes había sucedido.
Dentro de este contexto, la Asamblea legislativa tiene en sus manos un proyecto de gran trascendencia como es la reforma para Actualizar las jornadas de trabajo excepcionales y resguardar los derechos de las personas trabajadoras. Este proyecto de ley reforma los artículos 136, 142 y 144 y adiciona los artículos 145 bis y 145 ter del Código de Trabajo.
La Ley actualizaría el Código de Trabajo, que desde 1943 que fue emitido, no ha sufrido modificación en cuanto al tema de jornadas. La crisis generada por el COVID-19 y la urgencia de reactivar la economía y generar más empleo han evidenciado la relevancia de una reforma de este tipo y justifican sobradamente esta actualización.
Muchas cosas negativas se han argumentado sobre los cambios legales en el tema de la jornada, pero lo cierto es que es necesario actualizar las jornadas de acuerdo a las necesidades del mercado actual, especialmente en el contexto actual en el que necesitamos incentivar la economía y generar mayores oportunidades de empleo.
Aunque el proyecto de ley toca varios aspectos muy importantes, me voy a referir únicamente a los beneficios que traerán la jornada 4×3, es decir, la jornada ampliada para el sector empleador como para el sector de empleados.
La Dirección de Mercadeo, de la Cámara de Industrias, realizó una encuesta a las y los trabajadores que laboran en la jornada de 4×3 y obtuvo interesantes respuestas que deseo destacar.
En la primer pregunta que dice: ¿Considera que laborar 4 días por semana le ha beneficiado en su calidad de vida? El 93% de los encuestados respondió positivamente, una mayoría abrumadora le vio beneficios a este tipo de jornada.
En la segunda pregunta: ¿Si esta jornada le ha permitido desarrollarse en su vida profesional y familiar? El porcentaje mayoritario, un 91% respondió afirmativamente.
En la tercera pregunta si ¿Ha sufrido problemas ergonómicos o de salud en general derivados de este sistema de jornadas? un 86% respondió que no ha sufrido.
Esta encuesta, aunque es sólo un muestreo, permite definitivamente ver cómo un gran porcentaje de las personas trabajadoras que tiene esta jornada la encuentran favorable a su calidad de vida y favorable para desarrollar su vida profesional y familiar.
Esperamos que este proyecto de ley tenga el apoyo del actual gobierno pues, definitivamente permitiría generar más fuentes de empleo.